El 90,9% de ejecución presupuestal en obras y una recaudación de 205 mil millones de soles en los últimos 12 meses, sin duda le coloca a Pedro Castillo, como uno de los mejores presidentes de los últimos tiempos.
Tantas veces satanizado, humillado y deseado como el peor gobierno de los últimos tiempos, especialmente por quienes nunca aceptaron que un profesor rural y campesino llegue al Palacio, logró los mejores resultados económicos a nivel de ejecución presupuestal y, así como, en el desempeño de recaudación de ingresos fiscales.
A un buen gobierno no se mide por lo que habla bonito, ni porque tiene mejores credenciales académicas, muchos menos, si es blanquito o indio. Un buen gobierno se mide por el resultado de su trabajo y por los logros que ofrece para su pueblo. A pesar de los embates de la pandemia del covid-19 y los escollos creados por el Congreso golpista y la prensa nacional tradicional, al gobierno Pedro Castillo solo le bastó un año y cuatro meses para poner por encima, de los anteriores gobiernos, las cifras económicas de un buen manejo en el gasto público y en ingresos fiscales.
Pruebas al canto, las cifras hablan por sí solas. En los últimos siete años, en que hemos asistido a dos periodos de gobiernos; tanto el de derecha de Pedro Pablo Kuczynski (complementado por Vizcarra y Sagasti) y el de izquierda de Pedro Castillo, sin duda de lejos este último logró los mejores resultados en relación a gestión de recursos públicos. El gobierno de izquierda, en los dos últimos años (2021 y 2022), logró el 91.4% y el 94.7%, respectivamente, de ejecución presupuestal general, cifra nunca alcanzada durante los cinco años anteriores en que la derecha gobernó el Perú.
A nivel de inversión (obras), la ejecución no fue distinta. Este último año (2022) fue el hito de mayor desempeño histórico de los últimos siete años con una tasa de ejecución de 90.9%, cifra superior en más de 10% al mejor resultado que logró en el año 2017 el gobierno de la derecha de Pedro Pablo Kuczynski. En el 2022, de los S/ 18.5 mil millones programados (PIA) se han ejecutado S/ 16.8 mil millones, conforme podemos observar en la siguiente gráfica.
Por consiguiente, por donde se le mire, el gobierno Pedro Castillo superó largamente a los anteriores gobiernos de derecha en cuanto a la ejecución presupuestal. Aunque muchos dirán que, no hay obras de envergadura como ejecutaba Odebrecht. En efecto, de esas obras basadas en esquemas corruptas con términos contractuales entreguistas que solo han alimentado las utilidades de las empresas concesionarias, en el gobierno Pedro Castillo, no van a encontrar una sola. Lo que existe son obras orientadas a atender las necesidades urgentes de las poblaciones más humildes y alejadas, donde muchas empresas corruptas no quieren ejecutar porque no lo ven rentable.
Ingresos fiscales
En relación a la recaudación de ingresos, como es evidente, este buen desempeño en el gasto público se ha reflejado a la vez en mejores resultados a nivel de contribución de los agentes económicos. Es decir, cuando se invierte directamente para mejorar los niveles socioeconómicos de sectores sociales más olvidadas y excluidas, estos también responden mejor en cuanto al consumo lo que hace que las contribuciones se incrementen.
Como resultado de ello, los últimos dos años, el Estado peruano logró los records históricos en cuanto a la recaudación. En el 2021 alcanzamos una recaudación de S/ 180 mil millones de ingresos que constituían un incremento de 24% en relación al 2019 (año de prepandemia), y estos últimos doce meses (diciembre 2021- noviembre de 2022) hemos recaudado S/ 205.3 mil millones, es decir cifra superior en S/ 25 mil millones en relación al 2021, o un incremento de 14%. Con dicho logro, el Perú se encuentra en un mejor nivel para seguir reduciendo la brecha de déficit fiscal que históricamente arrastramos y, además, nos aleja cada vez mas de seguir dependiendo de los compromisos de endeudamiento. El año 2022, cerramos una deuda pública equivalente al 35% del PBI, que es una cifra sustancialmente inferior en comparación a los países de la región.
Si bien es cierto que, el mejor desempeño de precios de los minerales ha sido un factor muy valioso para este buen performance de ingresos, pero también es cierto que, otros sectores económicos vienen posicionándose cada vez en mejores niveles en cuanto a aportes a la caja fiscal.
Por ejemplo, el año pasado (2021) por el Impuesto Especial a la Minería recaudamos S/ 1 802 millones, a noviembre de este año se viene recaudando S/ 1 511 millones, lo que indica que no habrá mayor contribución este año por este rubro. Igualmente, en relación a las regalías mineras, el año pasado recaudamos S/ 3 573 millones, a noviembre de este año solo hemos registrado la cifra de S/ 2 057 millones, es decir los ingresos por regalías han mermado también sustancialmente para este año.
No obstante, en relación al Impuesto a la Renta (IR), el desempeño de sector minero es favorable, el año pasado recaudamos S/ 3 318 millones, este año, a noviembre, ya hemos alcanzado una recaudación de S/ 5 781 millones. Por consiguiente, por un lado, en cuanto a la recaudación por regalías vamos a tener un ingreso menor en más de S/ 1 000 millones, pero por IR incrementaríamos más de S/ 3 000 millones, dicho esto la minería, este año, aportaría un ingreso con un incremento por encima de los S/ 2 000 millones.
Desempeño de otros sectores económicos en la contribución del IR
Sin duda, la manufactura ha tenido el mejor desempeño. El año pasado por IR se recaudó S/ 763 millones, a noviembre de este año ya hemos sobrepasado los S/ 1 426 millones, es decir, este año, tendremos una recaudación superior al 100% en este sector. Igualmente, el sector comercio el año pasado contribuyó con S/ 947 millones, este año a noviembre ya hemos recaudado S/ 1 565 millones. En ese sentido, los mejores niveles de recaudación de este año, no provienen propiamente del sector minero, sino a la vez del buen desempeño de otros sectores.
Un gobierno que llegó al pueblo, que no tuvo el temor de afrontar los desafíos que se presentaron y, además, tuvo la capacidad de encarar los problemas del país, incluso asistiendo in situ para atender los problemas y las demandas. Prueba de ello, la mayor parte de las sesiones de gabinete se realizaron en provincias con la participación del pueblo, nunca nos hemos corrido ni nos hemos cansado de caminar para asistir a nuestro pueblo, fruto de ello ahí están los resultados. Que la historia nos juzgue.
