La Universidad Autónoma de Nuevo León, a través de su Secretaría de Sustentabilidad, presentó la conferencia magistral “Causas y consecuencias de la pérdida de cubierta vegetal en las cuencas de Nuevo León”, que forma parte del programa de actividades de la Semana del Medio Ambiente.
Las cuencas hidrográficas son fuentes de agua que fungen como un sistema de captación y almacenamiento para los ojos de agua del estado pues fluyen hacia un mismo río, lago o mar, proceso en el que la vegetación funge un rol indispensable, pues el dañar, alterar o destruir las áreas verdes repercute en el proceso natural de captación de agua.
“La cubierta vegetal es una especie de filtro que detiene la fuerza inicial del agua, evita que el suelo se erosione y amortigua el golpe de la lluvia sobre la tierra de tal manera que el agua llega al suelo escurriendo lentamente, lo que permite que no se pierda la cubierta del suelo, pues es el sostén de las plantas y la fuente de vida de la naturaleza, se filtre el agua de manera lenta hacia los acuíferos”, César Martín Cantú Ayala, Docente e investigador de la Facultad de Ciencias Forestales.
Según la investigación presentada, de 1968 a 2017, se han perdido 140 mil hectáreas de vegetación cada año en Nuevo León, situación que debe ser preocupante para los habitantes del estado, pues esto afecta al agua potable que se consume y ha significado un problema de escasez desde años anteriores.
“Tan solo las cuencas que abastecen al Río Bravo, Río San Juan y Río San Fernando, que son la fuente más importante de agua potable del área metropolitana de Monterey, se encuentran alteradas en esta superficie por actividades antrópicas, es decir, son espacios alterados por acciones humanas”, informó Cantú Ayala.
Detalló que algunas de las acciones que afectan directamente a las cuencas van desde la falta de creación de áreas naturales protegidas, las actividades recreativas que causan deterioros a la naturaleza y la urbanización, sin olvidar el cambio climático, que altera directamente el crecimiento de las plantas.
El investigador universitario advirtió a los presentes que son urgentes medidas de acción para combatir esta problemática, pues las afectaciones podrían agravarse si continúa el descuido de las cuencas que proveen de agua al estado en situaciones críticas.
