Benjamín Castro
El “libre comercio”, un sistema de rapiña colonialista
El acero en México es quizá uno de los mejores ejemplos del colonialismo rapaz en a que se ha sometido nuestro país desde 1983 con el primer gobierno de Carlos Salinas con M. de la Madrid como presidente, y que se reforzó con el TLCAN de 1994 y su engendro “light” en el 2019, el T-MEC.
México es un país que, en números redondos, consume unos 28 millones de toneladas (MT) de acero y sub productos al año, y solo produce entre 18 y 19 MT, es decir, tiene un déficit de casi 9 MT. Pero, al mismo tiempo “exporta” 12.5 MT. Esa producción y esas exportaciones las realizan principalmente 5 empresas casi todas ellas extranjeras como es el caso de Mittal-Arcelor que se ubica en Lázaro Cárdenas, Michoacán, con unos 3.9 MT; Fintech o Ternium, que opera en Nuevo León y Veracruz con unas 2.9 MT; Gerdau Corsa, que opera en Veracruz con unos 2.8 MT, y AHMSA, que opera en Coahuila y que, desde su privatización en 1991, ha venido pasando gradualmente a manos de inversionistas extranjeros, como son bancos o fondos privados de inversión, y produce 1.17 MT.
Claro, hay algunas empresas que dicen ser “auténticamente mexicanas”, como DeAcero, que opera en NL con una producción de 4.5 MT, o Grupoacerero, que opera en SLP con 1.18 MT, pero se dedican en más de un 90% a el reciclaje de chatarra, es decir, no producen acero. Hay otros que de plano se dedican solo a “distribuir y comercializar”, como el caso del grupo Villacero, que comercializa el acero que todavía produce en AHMSA.
Hay que señalar que estos números de producción son bajos también porque según dice la CANACERO, hay un “exceso de oferta” de acero en el mercado mundial y, por ejemplo, la producción del 2023 fue menor en un 15% que el año anterior. (Ver los 3 anexos, con graficas y datos). La historia de estos grupos acereros es una de pillaje colonialista y de sumisión por parte de las familias de la oligarquía mexicana que, al no tener proyecto de país, funcionan como cómplices o “asistentes” del saqueo extranjero.

Es el caso de la familia Villarreal, de Villacero, que vendió SICARTSA, el complejo de minas, puerto y producción de acero en Michoacán, en 1700 mdd, dado que a ellos Carlos Salinas les había vendido el mismo en solo 170 mdd. El complejo SICARTSA se construyó cuando el estado mexicano decidió conquistar el desarrollo industrial en base a la industria pesada y de maquinas herramientas. El complejo se entrego a L. Mittal, e que ha sido el instrumento del imperio británico para el dominio de la industria del acero mediante la “consolidación”, y a quien apoyaron para apoderarse de las empresas acereras de Polonia, Checoslovaquia, URSS, etc. después de la caída de la URSS por la via de las “privatizaciones “con la ayuda de Tony Blair y otros PM británicos.
Igualmente pasó con HYLSA o IMSA en NL, donde las familias Garza Sada y Canales Clariónd vendieron en 2005-2006 las acereras de su propiedad a la familia Rocca, de Argentina, misma que construyó su imperio en mas de 60 países, en base a colaboración con la dictadura militar argentina entre 1976-90, la cual le entregó la principal acerera de ese país vía la “privatización” de esta. Las familias Garza Sada y Canales Clariónd abandonaron el proyecto industrial de sus antecesores que habían hecho innovaciones en la industria e intentaron también producir automóviles y camiones, etc.
El caso de AHMSA es algo peor, la empresa que solo producía para el mercado interno del país fue entregada a la familia Ancira en 1991 para que mediante su saqueo la llevara a la “suspensión de pagos” o quiebra técnica en 1999, y la mantuviera así por 16 años, para reactivarla otra vez y volverla a quebrar y ponerla en venta a precios de ganga y sin poder pagar su deuda a proveedores y trabajadores en 2023-24. Ahora AHMSA produce más de un 40% para exportación y su “distribuidor” es Villacero, que ya no produce y solo revende acero, y es, además de su acreedor, el principal cliente y proveedor.

Donde también se expresa el saqueo colonialista de nuestro país en la industria del acero es en la composición de las exportaciones e importaciones. Del total de exportaciones del 2022, por ejemplo, unos 16 MT, un 70% son “materias primas”, es decir acero en bruto arrabio o acero esponja de bajo costo, pues Mittal y Ternium se especializan en eso, en bajar costos, sobre todo de mano de obra. Mientras que lo que menos se exporta son productos terminados, solo un 10%. En el caso de las importaciones es al revés, se importa solo 5% de materias primas y un 70% de productos terminados.
Somos pues, como diría AMLO: “Vendedores de naranjas y compradores de jugo de naranja”, pues no tenemos la industria de producción de bienes terminados. Y la producción de acero está en manos extranjeras en su mayor parte y en lugar de industrias que pudieran consumirlo y transformarlo tenemos maquiladoras.
https://www.canacero.org.mx/infosocios/documentosinstitucionales/Prontuario_Estadistico_de_la_Industria_Siderurgica_Mexicana_2023_final.pdf
https://www.economia.gob.mx/datamexico/es/profile/industry/basic-industry-of-iron-and-steel
Leave a Reply