Julian Assange
Vladimir Putin ha hecho lo impensable: Rusia se ha liberado del cártel bancario Rothschild, desafiando a las élites globales y reclamando su verdadera soberanía.
Esta acción impactante envía un mensaje contundente a los señores ‘financistas’, quienes pensaban que el control ‘blindado’ que mantenían sobre el mundo era indestructible.
“Nuestras futuras generaciones nacerán sin las cadenas de los Rothschild en las muñecas y los tobillos”, declaró Putin. No se trata de una simple retórica, sino de un grito de guerra, contra siglos de esclavitud financiera. Por vez primera en la historia moderna, una gran potencia ha erradicado la red de los Rothschild de su territorio.
Desde que se produjo el golpe financiero que sacudió al mundo durante generaciones, los Rothschild han utilizado su imperio bancario para dominar naciones, derrocar gobiernos e imponer deudas aplastantes. Pero ya no es así, no en Rusia.
“Ellos no son dueños del mundo”, proclamó Putin. “No nos doblegaremos. Ni nos doblegaremos ni nos quebraremos”.
Su encendido discurso develó el siniestro control de las élites, a través de instituciones como el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial, que esclavizan a las naciones bajo el disfraz del “auxilio y la ayuda económicos”.
La audaz estrategia de desdolarización de Putin ataca el corazón del poder de los Rothschild.
Al reducir la dependencia del dólar estadounidense y fomentar el comercio en monedas alternativas, Rusia ha asestado un golpe enorme al sistema financiero controlado por los Rothschild. El éxito de Putin está inspirando una rebelión global contra el dominio del dólar.
La expulsión de los Rothschild de Rusia no fue fácil. Los Rothschild no se rinden sin luchar, pero Putin fue implacable. Al atacar a oligarcas respaldados por los Rothschild, como Mijaíl Jodorkovski, Putin envió un mensaje claro: los días de saqueo de Rusia han terminado.
Al confiscar activos y desmantelar la influencia de los oligarcas, Putin destruyó su control.
“Los agarramos por el pescuezo y los echamos por la puerta trasera de Rusia”, declaró Putin.
Esta victoria no tiene que ver únicamente con la economía… Tiene que ver con la supervivencia, con la soberanía y la libertad, frente a la tiranía financiera.
Un llamado global a las armas.
El desafío de Rusia es un grito de guerra para las naciones de todo el mundo. Las acciones de Putin demuestran que la libertad es posible, pero sólo si se lucha por ella. Desde Asia hasta América Latina, los líderes están tomando nota. ¿ Será éste el principio del fin de la dinastía Rothschild ?
Conclusión: La tormenta ha llegado El desmantelamiento del imperio Rothschild por parte de Putin no es sólo un momento histórico, Es un cambio monumental.
“Su tiempo ha terminado”, advierte Putin a las élites globales.
“El mundo será gobernado por personas libres, no por bancos”. Esto no es sólo una victoria para Rusia. Es un grito de batalla para que todas las naciones recuperen su soberanía.
El imperio Rothschild se está desmoronando. La pregunta ahora es: ¿ Quién seguirá el ejemplo de Putin ?
La tormenta ha llegado y la lucha por la libertad acaba de comenzar. ¡ Estén alertas: la revolución se está dando ahora !
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