Por Francisco Sepúlveda Cañamar
Escribí más temprano que “el próximo año espero me reconozcan como un soberbio escritor, y no como un escritor muy soberbio”.
Alguien me contestó: “Solo dices la verdad en el 2o país con más fakenews e infodemia del mundo”.
Me quedé pensando. Y es cierto. He perdido muchas “amistades” y “contactos” por escribir la verdad.
Pero también me hizo pensar en los “periodistas” que firmaron un desplegado exigiendo que AMLO dejé de realizar “La Mañanera”, dizque “por incitar al odio”.
Ojo. Dicen que “por incitar al odio”, no por “mentiroso”.
Y, la verdad, no puedo culpar a los periodistas. Porque debe ser muy odioso, para ellos, que la gente los tache como “mentirosos” después de ver “La Mañanera”.
Lo más hilarante: en lugar de decidir publicar la verdad, piden censurar al presidente.
Es una lástima vivir en una sociedad donde para los medios de “información”, la verdad no sea un “rentable negocio”.
Pero es más triste ver que cuando ven que no pueden luchar contra la verdad, exijan censurarla, aduciendo razones de “odio”.
¿Qué acaso mentirle a la sociedad en su conjunto, es un acto de “amor”?
Lo más patético: al no poder mostrar datos duros, argumentos con peso sólido, que desmientan al presidente, exijen que mejor se “calle”.
¿Puede haber una actitud más soberbia, y más psicópata qué esa?
Así que, aquí seguiremos, viendo quiénes apoyan a la verdad. Y quiénes prefieren a la mentira, para poder seguir viviendo en sus delirios.
Porque hace mucho que aprendí que, cuando un mexicano dice la verdad, los demás ya no pueden hacer nada. Solo les resta aceptarla, o negarla. Pero quien niega la verdad, niega a la realidad también. E, insisto: quién niega la realidad, vive en un delirio…
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