Son 25 años desde que llegué a San Nicolás a trabajar por primera vez, hoy después de todo este tiempo, mi corazón ya no pudo con el ritmo propio del departamento de Prensa y pasé a formar parte de las filas de los pensionados del Municipio.
Después de nueve alcaldes, siete jefes, decenas de compañeros y alguna que otra amistad sincera, hoy no tengo más que gratitud para a la que fue mi casa por todo este tiempo, y para aquellos con los que compartí más tiempo que con nadie más en mi vida.
Dejo experiencias, mucho aprendizaje, diversión, muchas risas, también momentos tristes, algunos angustiantes, no todo fue maravilloso, tuve mis errores, pero de todo me quedé con un buen aprendizaje.
Debo agradecer al alcalde @DanielCarrillo, a la gente de Semesan (a quienes tantos sustos les di con mis tres infartos), a mis compañeros actuales y a los que pasaron por la oficina, a los funcionarios, a todos, a mi hija, a mi familia, a mis amigos que me dicen que es tiempo de descansar y de cuidar mi salud.
Me reitero a sus órdenes, porque si bien mi corazón se averió por haber dejado una parte de él en cada evento, en cada cobertura, en cada revisión de textos, en cada revista, en cada informe, flyer, desplegado o guión redactado, aún la pequeña parte que continua jalando, sigue amando la carrera de periodismo y no quiere alejarse de ella.
Hoy vuelvo a poder vestir de rojo, como no lo hice por convicción durante muchos años, pero el corazón, ese, es albiazul desde hace mucho y así se va a quedar mientras lata.
#Mientraselcorazónlata
#Graciassinceras
#Nomeharéweyconlatanda
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